RETORNO A LA UNIVERSIDAD
Eran
las seis de la tarde cuando recibí una llamada telefónica de mi coordinadora,
me pidió que nos reuniéramos en la biblioteca de la universidad para coordinar
las actividades, fecha del viaje a Valle Hermoso y repasar todo el cronograma,
hacía más de tres meses que no pisaba la universidad, pensé en llevar mi carnet
de estudiante pero estaba caduco, por lo que decidí dejarlo, cuando llegué a la
universidad observe que habían terminados las entradas electrónica por lo que
era necesario el uso del carnet magnético, que en mi época de estudio no
existía, al lado derecho de la entrada a la universidad esta recepción, la
joven que atendía me preguntó, ¿su carnet de estudiante? – le respondí que
hacia medio año que había culminado mis estudios y que estaba en proceso con mi
tesis, me pidió carnet de identidad y me entregó una ficha que decía VISITANTE, me dirigí a la biblioteca
que está ubicada en el cuarto piso del edificio de la universidad, observaba
todo y me parecía extraño, miraba las aulas y me acordaba cuando era
estudiante, como siempre sentado en el primer asiento, predispuesto a escuchar
las clases del docente y preguntar las múltiples dudas que hacía que mis
compañeros me miraran raro, no sé si era por las preguntas que hacía o porque
tenía rasgo de campesino, en fin, llegué a la biblioteca y me encontré con mis
antiguos compañeros que no entendía porque ellos seguían con materias
pendientes, nos pusimos a recordar viejos tiempos, y actualizarnos con
novedades que me sorprendieron, a decir verdad me gustó mucho reencontrarme con
mis compañeros, aquellos con los que compartí por cuatros años. Al cabo de media hora de retraso llegó mi
coordinadora, pidió disculpa por la demora y lo justificó con un incidente que
tuvo a última hora, revisamos todo el material de trabajo, hizo algunos ajustes
y lo firmo como aprobado. La fecha de partida quedó para el jueves 14 de
agosto.
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